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Diferencias entre la EPA y el INEM  

23 mayo, 2009

El desempleo se ha convertido en la principal preocupación de los ciudadanos. Existen cifras diferentes sobre las personas desocupadas y ello se debe a la diferente metodología para la obtención de datos que utiliza la EPA y el INEM.

    La crisis económica actual tiene un impacto directo sobre los ciudadanos en forma de desempleo. En los últimos meses el número de personas desempleadas a crecido a un ritmo vertiginoso, si bien, también se observa una desaceleración en el mismo proceso y seguramente, será el primer índice que con su recuperación y con la vuelta de la creación de empleo, nos instale en la certeza de que ha llegado el final de la crisis y el inicio de la recuperación económica. La velocidad que ha tomado la destrucción de puestos de trabajo ha provocado que el desempleo se haya convertido en la principal preocupación de los españoles, siguiéndolo el deterioro económico, según los últimos datos ofrecidos por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Se observa una desaceleración en el aumento de las listas del desempleo, y esta se convierte en la principal luz de optimismo a la cual agarrarse, dentro de la prudencia necesaria que implica el grave problema.

Existe cierta confusión entre los ciudadanos en torno a los datos que sobre el desempleo ofrecen los medios de comunicación, ya que si bien en abril aparecieron datos en los que se anunciaba que se había superado la cifra de cuatro millones de parados (EPA primer trimestre de 2009), en mayo, de nuevo nos encontramos con cifras todavía situadas por debajo de ese umbral, situando el número de personas desempleadas, en torno a los 3.600.000. Estos datos no son contradictorios, ambas cifras son ciertas, pero la cifra que supera los cuatro millones es la referida a la Encuesta de Población Activa  (EPA), que se pública trimestralmente, y la cifra inferior es la correspondiente  a los inscritos al Servicio Público de Empleo Estatal (INEM), es decir, las personas desempleadas registradas, y cuya publicación es mensual.

Reduciendo al máximo las definiciones de ambas cifras, podemos decir que la EPA, como su mismo nombre indica, es una encuesta, mientras que la otra responde a datos realmente registrados. Pero para una mejor comprensión, vamos a definir más extensamente ambos indicadores. La Encuesta de Población Activa (EPA) tiene una aparición trimestral y se trata de una investigación dirigida hacia las familias con el objetivo de conseguir datos de la población relacionados con el posible número de personas ocupadas, activas, inactivas y desempleadas. Como su propio nombre indica, es una encuesta. La realiza el Instituto Nacional de Estadística (INE), sobre 65.000 familias o 200.000 personas en cada trimestre. Los entrevistados tienen que contestar a unas preguntas sobre su situación en la semana anterior a la entrevista. Un mes y medio después se obtiene los resultados del trabajo realizado. La EPA tiene una publicación trimestral, y por ello se habla de la EPA del primer trimestre, la del segundo trimestre, etc. Así por ejemplo, y a modo de síntesis, una persona en la encuesta pasaría a engrosar la lista de parados, si tuviera 16 o más años; si en la semana anterior a la entrevista, hubiera estado sin trabajo, con disponibilidad para trabajar y hubiera estado buscando activamente trabajo. Para considerar que una persona ha estado buscando trabajo de forma activa, debe superar una serie de criterios como por ejemplo: haber estado en contacto con una oficina pública de empleo con el objetivo de conseguir trabajo, haberse  anunciado o respondido a anuncios de periódicos, haber estudiado ofertas de empleo, etc (para una mayor información en relación a la definición y criterios de la EPA el INE ofrece una extensa información). Sin embargo, la cifra de los registrados en el INEM, no obedece a ninguna encuesta, sino que se refiere a aquellas personas, que se han registrado en las oficinas de desempleo en ese mes. Tiene una aparición mensual, y por ello se habla del desempleo en abril, el desempleo en mayo, etc.

Los datos de la EPA y de la INEM, son distintos ya que utilizan diferentes metodologías para su obtención. Existen aspectos a favor y aspectos en contra entre unos datos y otros. Por ejemplo los datos de la EPA, pueden considerarse más extensos ya que nos ofrecen información sobre las personas activas, inactivas, ocupadas y desocupadas mientras que se puede argumentar que el INEM mide sólo el número de parados que están registrados en sus oficinas. A favor de los datos del INEM, se puede decir que mientras que la EPA, se trata de una encuesta que utiliza una muestra para extrapolar los datos al resto de la población, los datos del INEM son desempleados reales registrados con nombres y apellidos en sus listas. Pero también hay que decir a favor de la EPA, que existen personas que contestan que desean trabajar pero que no se encuentran inscritas en el INEM. Sin duda alguna ambas cifras y metodologías, EPA, INEM, son importantes y complementarias para llegar a buenas conclusiones sobre aspectos relacionados con el mercado de trabajo y la evolución del mismo y del desempleo.