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Euribor

¿A qué prestar atención antes de firmar una hipoteca?

7 junio, 2017

No debemos conformarnos con la primera hipoteca que nos ofrezca nuestro banco de toda la vida. Existen muchas ofertas y las hipotecas cuentan con muchas variables que hay que tener en cuenta en su conjunto, ya que la que nos puede parecer más atractiva puede que realmente no lo sea. Hay que prestar especial atención a los siguientes factores.

Tipo de hipoteca: variable, fija o mixta

Las hipotecas a interés variable tienen la ventaja de que desde el principio pagaremos menos que una hipoteca a interés fijo y se abaratará más si el Euribor sigue cayendo, pero pagaremos más si empieza a subir. El Euribor actualmente le queda escasísimo recorrido por abajo, prácticamente esta estancado aunque sigue mostrando mínimos históricos. La duda es cuanto tiempo se mantendrá así de bajo. De momento lleva ya muchos años cayendo, concretamente desde octubre de 2008 y en terreno negativo desde febrero de 2016. Parece ser que el Banco Central Europeo  (BCE) sigue dispuesto a no subir los tipos de interés durante más tiempo, y la evolución del Euribor depende de los tipos de interés si estos suben el Euribor sube y viceversa.

Las hipotecas fijas son las más indicadas por las personas a las que no les gusta ni el riesgo ni las sorpresas. Desde la primera letra hasta la última se pagará lo mismo, a menos que se hagan amortizaciones anticipadas, pero también se pagará más al principio que una hipoteca a interés variable. Luego dependerá de la evolución del Euribor. Si este ha subido mucho durante la vida de la hipoteca seguramente habrá valido la pena la hipoteca a interés fijo, pero si no ha subido o ha subido poco, la hipoteca a interés variable habrá resultado finalmente más ventajosa. Pero claro, nadie tiene la bola de cristal.

Las hipotecas mixtas se suelen caracterizar por ser a tipo fijo al principio y variable en los siguientes años. El tipo fijo del principio suele ser superior al variable. No nos parecen atractivas, porque ahora el Euribor está hundido y  al poner un tipo fijo al principio superior al variable, se pierden los años en los que el Euribor se encuentra bajo.

Si la hipoteca es a interés variable o mixta hay que fijarse atentamente en el diferencial sobre el Euribor.

El diferencial

El diferencial suele ser el campo de batalla de las ofertas bancarias. Todas tratan de ofrecer el diferencial más atractivo porque es lo que más llama la atención de los ciudadanos. El diferencial es lo que se añade al valor del Euribor. Si por ejemplo el Euribor se encuentra en el 2% y el diferencial de la hipoteca es del 1%, el interés que se aplicará a esta supuesta hipoteca es del 3%. Actualmente hay hipotecas con diferenciales muy ligeramente inferiores al 1%. Pero ¡cuidado!, que el diferencial sea bajo, no significa que sea una hipoteca atractiva. También hay que mirar los productos vinculados, se trata de las ataduras que nos impone el banco y cuantos menos sean y más baratos mejor, porque los productos vinculados suelen costar dinero, y no son cuestión baladí.

Los productos vinculados

Domiciliar la nómina, pensión, prestación de desempleo o pago seguridad social de autónomos, domiciliar y pagar una determinada cantidad de recibos, utilizar una cantidad de veces la tarjeta de crédito en un determinado periodo de tiempo, contratar seguros de hogar o de vida, etc., suelen ser productos vinculados, unos no suponen dinero pero otros sí y por lo tanto hay que también tenerlos en cuenta a la hora de firmar una hipoteca, porque suponen una cantidad de dinero extra que deberemos aportar periódicamente a parte de la cuota mensual de la misma hipoteca.